viernes, 16 de marzo de 2007

Endogamia

Cuando empecé a trabajar en prensa saqué un par de conclusiones.

1. Voy a estar absorbida y jodida el resto de mi vida, así que resignación y buenos alimentos
2. Por mi salud mental: nunca, nunca, nunca me liaré con otro periodista

La primera afirmación fue cuajando con el tiempo. La segunda es, cada día que pasa, más difícil de mantener. Y es que la endogamia no es exclusiva de la monarquía. El gremio es como el plantel de hormonados de Melrose Place: un revoltijo que prueba TODAS las combinaciones sexuales posibles (y algunas imposibles, créeme).

Así que decidí explorar las capacidades amatorias de otros colectivos profesionales y huir de las del mio propio. Músicos, comerciantes, electricistas, deportistas, algún escritor frustrado... La cuestión era no convertirme en protagonista de los cotilleos de las redacciones, que yo misma compartía y comentaba. Porque, no lo olvidemos, no somos más que marujas de profesión. Pero lo peor de los duos de periodistas es que acabas cantando la misma canción día y noche, dentro y fuera, también en festivo.

Aunque por ahora mantengo impoluta mi teoría, admito que es difícil mantener el principio de no injerencia. Por una cuestión práctica: pasamos más tiempo juntos que la suma de toda nuestra vida social extra profesional. Por una cuestión de comprensión: quién va a entender que me moleste una coma entre sujeto y verbo si no? Por una cuestión de valoración (errónea): un buen periodista se nos aparece más guapo, más alto y más inteligente. Por eso un buen texto nos hace más cosquillas que un buen culo. A veces

8 comentarios:

Marta Luth dijo...

¿Quién te ha tirado los trastos dentro de la redacción? ¿Con quién te has liado? ¿Es de la mesa de deportes, de política o de maquetación? ¿Es hombre, mujer u ordenador? ¿Quién te gusta? ¿Hay posibilidades? ¿Habrá boda? ¿Cuántos hijos? ¿Estas enamorada? ¿Iréis juntos a las ruedas de prensa? ¿Haréis entrevistas compartidas? ¿Os repartiréis el Pulitzer? ¿Quién es, quién es, quién es? ¿Puedo llamar a Jorge Javier o Javier Jorge o como se llame?
¿Cuándo lo hareis público???????

Peter Parker dijo...

No hago comentarios sobre mi vida privada, pregúntame por mi libro

Lois Lane dijo...

Yo pregunto por el libro. Cuéntame cómo se te ocurrió. De dónde sacaste la idea para la trama. Oh, sí, esas son el tipo de preguntas que nunca deben faltar en una entrevista a un autor que bien podría tener un libro, pero que, en caso de tenerlo, el periodista ni lo sabe, pero tiene que entrevistarlo porque sí. Así que, ahí quedan. Por si las moscas. O por si los moscones, en este caso.

Ana C. dijo...

Eso es realmente comprensible. Lo de sentirse atraído por alguien de tu misma profesión, digo. Lo de la coma explica casi todo.

Me encanta leer un blog escrito por profesionales de la profesión que más envidio.

Anónimo dijo...

jajaj, buenisimo como siempre.
seguid asii, haceis que el mundo del periodismo sea más real y humano de lo que sale en el tomate.
menos mall

Anónimo dijo...

Para lios el del otro dia de Amadeu con L.

Marta Luth dijo...

Queremos la fuente de la última exclusiva.

¿Quién es ese tal Amadeu?

Peter Parker dijo...

Las teorías a veces son solo eso, teorías. a esta se la llevó el tequila por delante. he dicho