viernes, 21 de diciembre de 2007

Viva el servidor... ¡cuando no funciona!


¿Qué haces cuándo quieres trabajar y no puedes?

Hoy quiero trabajar un montón (los viernes estoy que me salgo), pero el servidor no funciona, no puedo acceder a las páginas de la publicación y no puedo editar ningún texto.

Es muy jodido que un viernes, después de una semana de duro trabajo, esté condenada a:
1) Pasearme por el youtube
2) Escribir la nota del regalo del amigo invisible que me toca entregar el martes a un pariente de la familia política (¿por qué le llaman política cuando no es tuya, porque con ellos tienes que ser más políticamente correcto en todo siempre?)
3) Hacer una lista de chorradas en el blog
4) Hacer cafés
5) Comer turrones que llegan a los compañeros de la revista de gastronomía que hacen al lado
6) Compartir los hallazgos del youtube con los compañeros
7) De vez en cuando, despotricar porque no hay servidor (hay que mostrar indignación, si no, parece que te alegres....)
8) Oír éxitos de los 80 en la radio (ahora mismo tocan aquello de 'las maravillas del malai uo uo uoooo')
9) Contar los minutos que faltan hasta las dos y rezar para que el servidor no se ponga en marcha a las dos menos cinco
10) Inventarme algo para poner en el número 10 de la lista

Uffff!

4 comentarios:

Marta Luth dijo...

¿Por qué se llama servidor, si no sirve para nada?

Scarlet Ojala dijo...

A mí me ha servido en bandeja un buen viernes de vagancia...

Alberto Ramos dijo...

El jueves por la noche tuvo lugar la cena de empresa de los servidores. Y la de los autobuseros de Barcelona.

humo dijo...

¡Ah!, pero, ¿es que hay veces en que quieres trabajar?
(Entendiendo trabajar como esa actividad ajena a tus intereses y que realizas con fines exclusivamente de supervivencia)
A mí nunca me ha pasado. Debe ser una sensación agradable.