miércoles, 21 de febrero de 2007

Punto G

Todas las redacciones tienen su punto G. En cierto modo, se trata de un punto erógeno, pero en plan disléxico (o sea, -siempre en broma- diríamos que no da ni una). El punto G también puede interpretarse como una tergiversación de la identidad. O de una sinécdoque, que nadie recuerda lo que es, pero que en las redacciones se utiliza a menudo.

Me explico: hay tantos periodistas apellidados García, que buena parte de ellos se quedan sólo con la inicial; así que firman con su nombre de pila, una G. y el segundo apellido. Algunos lo hacen justo al incorporarse al diario. Firman así para distinguirse del resto de Garcías, porque a todos nos gusta diferenciarnos del resto de humanos (aunque luego siempre preferimos que nos consideren personas humanas antes que animales). Otros empiezan a firmar como G. para remarcar un cambio de vida. Por ejemplo, cuando pasan de trabajar en Cultura a la sección de Deportes, consideran que el nuevo fichaje es tan importante que esa modificiación (ese change of life) merece también un cambio de reconocimiento y de nombre.

En cuanto uno de los redactores firma con G., ya está: sus compañeros lo llamarán siempre Puntogé. No es que los periodistas sean todos una panda de disléxicos (que también). En realidad, todos saben que G. se lee Gepunto; pero ése es mayor juego de palabras al que puede aspirar un periodista. Y utilizándolo se siente orgulloso.

En todas las redacciones hay un Puntogé. El de la nuestra, está leyendo esta biografía ahora mismo mientras se pone rojo como un tomate y se ríe. En plan, GéGéGé...

8 comentarios:

Ana C. dijo...

Me encanta este blog, me parece que se consiguieron una lectora más o menos fiel.

Ana C. dijo...

Parece que tienen un problema con la dirección de e-mail a la que se notifican los comentarios.

Anónimo dijo...

Por a(i)lusiones, debo desmentir algunos bulos que los maledicentes andan esparciendo acerca del origen de mi sobrenombre. Que en realidad, como se verá, no es tal, porque es más apropiado referirse a él como metonimia. Como veréis en la wikipedia, eso significa más o menos tomar la parte por el todo. Pues bien: se da el caso, como muchos y muchas sabréis, de que fui el primero en hallar el puntogé en cientos de hombres, mujeres y animales. Hasta ese momento, todos creían que dicho concepto era un invento de alguna lesbiana peluda. No es la voluntad de distinguirme del rebaño, o la de forjarme una identidad en mis nuevos cenáculos, la que me empujó a anunciar mis cualidades ya desde la firma. Es sólo una advertencia: no os acerquéis desprevenidas, puntogé os revolucionará el ídem.

Peter Parker dijo...

Ana c: Y bien feliz que nos haces! Por cierto, ¿qué problema de correo? Lo revisé y sigue todo bien.

Peter Parker dijo...

Distinguido Puntogé:

Hablo en nombre del equipo T al completo para mostrar nuestro gozo inconmensurable al descubrir que, ¡por fin! has decidido participar activamente en este nuestro pequeño lugar de esparcimiento. Esperamos, ansiosas, que no sea la primera vez...

Ana C. dijo...

Cuando les dejo un comentario, recibo este mensaje:

This is an automatically generated Delivery Status Notification

Delivery to the following recipient failed permanently:

elquipot@gmail.com

Technical details of permanent failure:

PERM_FAILURE: SMTP Error (state 9): 550 5.1.1 No such user c13si3948295anc


Probablemente esté mal la dirección de e-mail, que deba empezar con "elequipot" y no "elquipot"

Peter Parker dijo...

Ana c: mil gracias, ya está arreglado

blogservador dijo...

Los iento puntoge. Pero los garcías no tenemos de eso, por eos nos llamamos así. Por eso somos legión. Somos los eunucos del siglo XXI